jueves, 30 de diciembre de 2010

Fin de un año

Y otra vez, y de nuevo, un año más termina, pasa a formar parte de nuestros recuerdos.  Y con ello, uno nuevo, se cuela en nuestras vidas para comenzar un nuevo digito. Simplemente es un número, tiempo dividido en dos partes iguales, manera de fragmentar el tiempo y el recuerdo, el pasado del presente. Pero también un buen momento para juntarse, estar en familia, rodeado de la gente a la que quieres, acordarse de los que ya no están, se encuentran lejos o un día los caminos dejaron de abrazarse, pero que en el corazón se encuentran. Y ser más sincero que otros días, quizás por el ambiente más festivo o más sentimental, hace sentirte delicado.

Por eso, creo que es un buen momento para echar la vista atrás, y reflexionar durante unos minutos. Para muchos, este ha sido un año bueno, y para otros no lo ha sido tanto. Sé, que cada uno tiene su experiencia y sus propios recuerdos, y resultan mucho más interesantes que el del resto, pero al menos yo hoy, y aquí, comentare los míos.

Ha sido un año lleno de ilusión, sorpresa, incertidumbre y también, por que no, algo de tristeza. Fueron muchas clases las que compartí con algunos amigos que guardo mucho, muchos videos y muchos planes, de los que me costo desprenderme. Mucha gente nueva, gente que me sorprendió, y amigos nuevos que me han hecho los días más fáciles. He conocido más a mis amigos, me he acercado más a ellos, y ellos lo han hecho conmigo.
He conocido el amor, mucho más de lo que nunca llegué a pensar. He reído a carcajadas, e soñado despierto, también no he querido despertar de ellos. Me han regalado regalos que nunca jamás olvidare. He hecho reír y soñar también. Me han sorprendido y he puesto cara de bobo en ocasiones. Mis tardes con los niños, nunca lo olvidare por que aprendí mucho con y de ellos. Por supuesto, todos los maravillosos recuerdos que me llevo del mejor verano de mi vida en la ciudad de mis sueños, donde viví y compartí experiencias que nunca podré olvidar, calles, planes, esencia londinense, compañía, no se que pudo ser, pero lo llevo muy dentro.

En este año, creo que he madurado, al menos, creo que he aprendido. Por supuesto, me he equivocado muchas veces, y desde aquí y de nuevo, me disculpo si alguna vez os hice daño, no me porte como fue debido o cometí errores, creo que es bueno darse cuenta de ello. Me he caído y me he levantado, aunque muchas veces sin buen resultado. He llorado de tristeza, y me he hundido en la miseria, pero también he sonreído. Un año más que se va y pasa ante nosotros. Siento si este discurso no es todo lo alentador o alegre que puede esperar uno para despedirse del año. Supongo que con el tiempo solo recuerdas lo bueno de las cosas, y es cierto, pero como todo, todo lleva su tiempo. Por supuesto, me quedo con todos los momentos preciosos que he vivido con cada uno de vosotros este 2010.

Muchas gracias por darme sonrisas, y hacerme reír como lo habéis echo, escucharme y darme aliento cuando lo he necesitado.

Dejo un año intenso donde algunos de mis deseos se cumplieron, otros en cambio se esfumaron y tuve que aprender a perderlos.

Espero que este nuevo año, este lleno de sorpresas, salud, y por supuesto y lo más importante, que pido para mi, ser capaz de hacer frente a los problemas, a las caídas y levantarme de nuevo, ser feliz.
La vida son dos días y es algo muy bello que debemos aprovechar.

Gracias por leer mi blog :)

Feliz año 2011!











 















Música: Viva la vida de Coldplay, Everybodys free de Romeo & Julieta, Piano Cover Use somebody de Laura Jansen.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Entre sabanas

Si… amo soñar. ¿Lo recuerdas bien? Me dejaba llevar. Todos nos dejamos llevar a veces, y nos gusta. Si… era tu mano. Fue cuando suavemente con un gesto, y de forma lenta y sencilla, me acariciaba la mejilla. Esta se desplazaba lentamente, y con mucho cuidado rodeaba mi rostro.
Mis dedos palpan tu zona sonrojada de la cara, y como si de un cauce al mar se tratase, son guiados a tus labios. Si… eran tus labios.

El bello se eriza, y escalofríos manan por nuestro cuerpo. Y no puedes explicar como esa sensación va sumamente lenta y es tan perfecta, como puedes sentirte encajado en ese rincón mínimamente pequeño del mundo.
Nadie lo sabe, nadie lo siente, solo yo.

Puedo ver todos tus sueños y metas. El miedo no esta, le hicimos quedarse tras la puerta y en el pañuelo que envuelven mis ojos. Es esa mirada, la que me dice que avance, que te mime, que te ame. La que me hace saber que es ahí y en ese momento, que esta ocurriendo…

Suavemente y sin tapujos, estas viendo todo de mí, nadie más me pudo ver así, y nada me avergüenza.
El cuerpo desnudo es precioso, sin tapujos, y sincero.

Mi mano se desliza de los suaves labios, y se desplaza hasta tu pelo, donde despeinándolo y con mucho cuidado, para que no se apague ninguna llama de la habitación, recorre tu piel, aproximándote a la mía. Sí… a la mía.

Las sabanas nos rodean, están arrugadas, pero son las que nos envuelven, las que son participes del momento. Y en días como estos, la manta nos resguardaría del frío invierno. Como nuestro cobijo en la montaña, donde poder jugar y corretear.

Me he aproximado mucho a tu piel, pero nunca es demasiado.
Mi piel te roza, se combinan, están echas para unirse, están preciosas.
Suave y delicada, la trataré bien.

Nuestros labios se buscan, y tranquilamente, por que nada más importa, se encuentran, se acarician, y se trasmiten toda la pasión del momento. Unos a otros les pide, que no les deje nunca, y los otros les contesta, que no lo hará, que nunca se separarían de ellos.

Tu cuerpo… solamente es perfecto. Y con suavidad y humedecidos, empiezan a deslizarse por tu cuello, por tu pecho… es tan delicada, que he de mimarla, no quiero hacerte daño, pero la besaría siempre.

¿Y nuestros pies? ¿Que me dices de ellos? Ya se han encontrado los unos a los otros. Unos están fríos, otros no. Nuestros dedos encajan. Sí… encajan.
Dime que no es una señal, por que no te creeré. Que no se han esperado siempre…

Las velas ya se han consumido, las sabanas y el lugar guardaran el secreto de nuevo. Ya, y con los ojos achinados, me has sonreído, y yo… Y yo siento que encajo, que nada más importa, y que bajo esa pequeña llama restante de la vela, es donde me quiero quedar.

Comienzo a abrir los ojos, y estoy entre sabanas. Pero no son las mismas, ni siquiera puedo oler el aroma que sentía, ni ver lo que veía.
Sí… he despertado, y no me a dado tiempo de despedirme de ti, ni de echar un último vistazo a tu cara antes de despertar…
Hay veces que te gustaría soñar toda la vida, aunque sepas que no es real, o simplemente, no despertar a veces.


Música: Lie to me de Shane Mack, Piano cover Use somebody de Laura Jansen.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Protagonista de tu propia vida

Ya son muchas mañanas las que me levanto pensando, si el destino me ha colocado aquí, o soy yo el que dirige mi vida.
Si estoy adoptando posición meramente espectador de ella, o estoy al filo de las riendas.
Si todos mis errores y aciertos del pasado marcarán mi futuro. Si tendré que empezar a convivir con el silencio de mis palabras, o el de una tecla no pulsada. A aprender a apaciguar mis emociones y conducirlas a la sonrisa, a ser feliz. A querer los recuerdos como son recibidos y no refugiarse en el recuerdo. A apreciar a los tuyos y labrar tu futuro, tus días, mi felicidad.

Yo quiero poseer las riendas de mi vida, y no dejarme llevar por la desorientación, la extrañeza y la fugacidad del tiempo. No quiero sentirme perdido y desencajado. Quiero ser yo quien decida, quien se equivoque y quien llore de alegría. Quien no siga los pasos de otros y camine a la deriva.

Gracias a un amigo, tuve de nuevo la oportunidad de expresar mis emociones y vivencias, de escribir lo que pase por mi mente cuando más lo necesite, y de recuperar de algún modo, un vínculo con mi pasado y mi futuro presente. De empezar algo nuevo, si. Quiero ser yo quien siga mis propios pasos. La vida es corta, pero hay mucho que contar.

Y ahora toca lo más difícil, lo más duro, comenzar un nuevo camino cuya meta es la de la felicidad. Donde, ante todo, uno mismo, es el protagonista de su vida.

Musica: I'll try de Jesse McCartney.